ONU Mujeres/Ryan Brown Silene Salazar, cofundadora de la Red Nacional de Mujeres Indígenas y Bisexuales en Bolivia. Una activista boliviana pone de manifiesto cómo las mujeres indígenas que se identifican como lesbianas o bisexuales sufren una triple discriminación que les obliga a migrar de sus comunidades y alejarse de sus familias, de su cultura y hasta de su propia identidad. Para muchas familias indígenas la homosexualidad simplemente “no existe ”, cuenta Silene Salazar, una mujer quechua quien a sus dieciséis años se aceptó como lesbiana. “ Bolivia es un país muy machista, entonces ser mujer es complicado. Mi familia es muy machista y existe la heterosexualidad obligatoria . De cierta manera la mujer está con la función de reproducirse, tener hijos y casarse. Identificarse como lesbiana es muy fuerte por la discriminación”, dice. A Silene la discriminación de género y por orientación sexual, y el racismo por ser indígena, no la detuvieron, sino que la inspiraron para con
Internacional JAVIER ESCARTÍN escarzgz / MADRID Día 25/08/2013 - 10.08h Temas relacionados Javier Escartín (personajes) Vladimir Putin (personajes) Homosexuales (acontecimientos) Además de Rusia, Moldavia también ha aprobado su propia ley contra la «propaganda homosexual», y otros países como Lituania, Armenia o Ucrania han presentado propuestas similares reuters Un grupo golpea a Svyatoslav Sheremet, activista homosexual ucraniano, en mayo de 2012 No hay tregua para los gays y lesbianas en Rusia. Pese al clamor internacional contra la la ley que prohíbe la llamada «propaganda homosexual», una forma eufemística de censurar cualquier actividad pública de reivindicación y defensa de los derechos de este colectivo, el Gobierno ruso se mantiene firme y no derogará la controvertida ley. De hecho, los episodios homófobos se siguen sucediendo en el país . En las últimas horas se ha publicado un vídeo en internet donde se ve a un
por Óscar David López De la columna 'Gracias por su preferencia sexual' Hace poco me visitó un amigo gay y lo llevé de ronda nocturna en Monterrey. En una cantina donde la media de los asistentes son traileros y vestidas, ahí vio a uno que le gustó al instante: tatuado, cara de malo, pelo a rapa, atlético pero no fisicoculturista, entonado en cervezas pero tampoco borrachísimo. Después de un par de miradas, arrimones y bailes seductores, los dos se fueron a un rincón. Todo indicaba que en cuestión de segundos me quedaría abandonado como perro debido a que ellos se fugarían al hotel donde se hospedaba mi cuate. Pero no. De pronto, mi amigo con cara de diva alzando la ceja se acercó para decirme: "¡El puto chacal me quería cobrar! ¡A mí! ¡A mí que la mamo más delicioso que la de Garganta Profunda !" Y lo mandó a volar. Según él, en cualquier otro lado los chacales lo hacen gratis. O al menos con él (que no está para arrojarlo al perro) sí se echan un pal
Comentarios